A mi corta edad, entiendo ahora el porque somos “la luz del mundo”.
Somos la luz, si, pero no por que traigamos sabiduria con nosotros al nacer, sino porque somos inocentes. Exentos de culpa, mas no perfectos. Somos puros, porque aunque naciendo pecadores no conosemos lo que es pecar. Poque no sabemos que existe el bien y el mal.
Somos luz, no necesariamente porque traigamos felizidad al nacer, sino porque somos compañia. Porque cuando se ay mas de uno, ya no se esta solo...
Somos “la luz del mundo”, pero cuando se habla de romantisismo. La realidad es que no se puede escarbar el pasado para corejir los errores, y nosotros somos lo unico que le queda al mundo.
Hoy no somos ni luz, ni oscuridad... simplemente una esperanza. Somos el futuro, les guste o no. Y como somos imperfectos, tenemos nuestras consecuencias. Si, somos la luz del mundo pero cuando aun nos queda la inocencia. Cuando no nos afecta el que diran. Cuando las cosas mas pequeñas aun son nuestra felizidad.
Pero la inocencia acava, y nada de oro puede permanecer. Y de esta manera abansamos sin brillar ni alumbrar. Siendo rebeldes en nuestro andar y diciendo, “que les importa, es mi vida”. Pero si azi fuera no habria especies de animales, lo cual si las ay. Todos comeriamos flores, mas no es asi.
El caso es que aunque no somos lo que otros quisieran que fueramos, no dejamos de existir.
No vivo porque estoy viva...
Vivo porque soy y estoy y porque quiero.
Porque no ay peor pecado que el de desperdisiar lo mas presiado que tememos,
Que es el vivir el dia a dia ...
Mientras aun nos queda vida...